Luz azul: efectos en la salud, límites seguros y cómo evitar la exposición excesiva

La luz azul es una parte del espectro de luz visible que emiten muchas fuentes de luz, como el sol, las pantallas de dispositivos electrónicos y algunas bombillas LED. Aunque la luz azul tiene sus beneficios, como regular el ciclo de sueño-vigilia y mejorar el estado de ánimo, la exposición excesiva puede tener efectos perjudiciales en nuestra salud.

Efectos de la luz azul en la salud

1. Alteración del sueño: Esta luz puede interferir con la producción de melatonina, una hormona que regula el sueño. La exposición a la luz en la noche puede retrasar la liberación de melatonina, lo que provoca dificultad para conciliar el sueño y mantenerlo.
2. Fatiga visual: La exposición prolongada a la luz de las pantallas de dispositivos electrónicos puede causar fatiga visual, sequedad ocular y enrojecimiento. Esto se conoce como síndrome de la visión por computadora (CVS).
3. Daño a la retina: La exposición excesiva a este tipo de luz puede aumentar el riesgo de daño a las células de la retina del ojo, lo que podría conducir a la degeneración macular relacionada con la edad (AMD), una causa principal de pérdida de visión en personas mayores.
4. Efectos en el estado de ánimo: Aunque la luz azul puede mejorar el estado de ánimo, la exposición excesiva, especialmente durante la noche, puede causar cambios de humor y síntomas de depresión.

Límite saludable de exposición

No existe un límite específico y universal que defina la cantidad segura de exposición a la luz, ya que esto puede variar según factores individuales como la edad, la sensibilidad ocular y el estilo de vida.

No obstante, es importante equilibrar la exposición a este tipo de luz para obtener sus beneficios sin sufrir efectos perjudiciales. Se recomienda evitar la exposición intensa al menos dos horas antes de acostarse para minimizar la alteración del sueño.

Cómo evitar la exposición excesiva

1. Hacer pausas frecuentes: Al utilizar dispositivos electrónicos, es importante hacer pausas regulares para descansar los ojos y reducir la fatiga visual. La regla 20-20-20 es una guía útil: cada 20 minutos, mire a una distancia de aproximadamente 20 pies (6 metros) durante 20 segundos.
2. Ajustar la configuración del dispositivo: La mayoría de los dispositivos electrónicos permiten ajustar la temperatura de color, el brillo y el contraste de la pantalla. Ajustar la temperatura de color a una configuración más cálida reduce la cantidad de luz azul que emite la pantalla y puede ayudar a reducir la fatiga visual.
3. Usar filtros de luz azul: Existen filtros de luz azul para pantallas de dispositivos electrónicos que pueden reducir la cantidad de luz azul que llega a los ojos. Estos filtros pueden ser una opción útil para quienes pasan largas horas frente a una pantalla.
4. Usar gafas con lentes especiales: Las gafas con lentes especiales que bloquean la luz azul también pueden ser una opción para reducir la exposición a la luz azul.
5. Usar iluminación adecuada: Las bombillas LED emiten una cantidad significativa de luz azul, por lo que se recomienda usar bombillas con una temperatura de color más cálida para reducir la exposición a la luz azul en el hogar.