La cadena de suministro es la clave para que cualquier industria pueda ofrecer un servicio o producto de calidad. Sin ella, todos los procesos que se deben llevar a cabo no pueden lograrse, y hay que encontrar la clave entre la rentabilidad y el buen servicio que toda empresa debe ofrecer sin importar el rubro al que se dedique. De lo contrario, llegar a la excelencia será un camino mucho más difícil.
Dicho esto, dentro del espíritu de una organización siempre debe estar la voluntad de lograr mejorar todos sus procesos, buscando que sean lo más práctico que se pueda, tanto en términos de costos como de tiempos y de calidad.
El papel que juega la trazabilidad para optimizar una cadena de suministro
Hay que tener en claro que la trazabilidad permite tener un registro exacto de todo lo que se lleva a cabo en la cadena. Esta consiste, en el proceso en el que la empresa tiene bien identificado qué es lo que se hizo, de qué manera, dónde y cuándo. Además de esto, también debe ser del conocimiento de la empresa quiénes participaron en la cadena de suministro.
Teniendo toda esta información, es mucho más fácil analizar de qué manera se pueden mejorar todos los procesos, lo cual es primordial a la hora de hacer crecer una empresa, sobre todo a la hora de diseñar y planificar la cadena.
Importancia de optimizar la cadena de suministro
Actualmente, hay muchas maneras de lograr optimizar la cadena, casi todas vinculadas al avance de la tecnología que es aprovechada para el beneficio de la empresa. La última novedad en este sentido es la implementación de la inteligencia artificial o el blockchain para contribuir con su mejoría. Estas herramientas ayudan a una buena toma de decisiones y a determinar inconvenientes que haya, a la vez de aportar posibles soluciones.
Si se aplica correctamente en cada una de las fases que toda cadena debe tener, seguramente tendrá mejores resultados. Dicho esto, hay que dejar muy en claro que este tipo de tecnologías deben ser supervisadas por algún profesional. Dejar todo en manos de la tecnología no es recomendable, pero sí apoyarse en ellas para finalmente dictaminar soluciones positivas para los intereses de la compañía.
Fases que deben tener las cadenas
Toda cadena de suministro debe comprender unas fases en las que se desarrolle. Son tres fases que tiene, cada una, una etapa que no pueden ser saltadas entre ellas. De lo contrario, se corre el riesgo de que la ejecución, o planificación de la misma falle, y el producto o servicio brindado finalmente sea deficiente. Dejando esto claro, mencionemos estas fases:
El diseño de la cadena
La primera fase que toda cadena debe tener es el diseño de la misma. Acá se establecen todos los procedimientos que deben llevarse a cabo, además de la ubicación de las instalaciones donde cada uno de los procesos será almacenado. También tiene que determinarse la manera en la que será transportada, y los objetivos planteados con base en la demanda esperada.
La planificación
Esta fase ya tiene que ver con la planificación como tal del inventario y la coordinación de los proveedores para que se pueda ejecutar a la perfección lo planificado. De igual modo, se tiene que tener toda la información de dichos proveedores y lo necesario para que al momento de ejecutarla todo esté sin problemas.
Ejecución de la cadena
La última fase en toda esta cadena es la de ejecución, la cual tiene como objetivo llevar a la acción todo lo que fue diseñado y planificado con anterioridad, a fines de cumplir con los objetivos deseados.
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