Por causa de los bajos niveles de lluvia, los embalses cercanos a Bogotá que aseguran el agua no están lo suficientemente llenos. Para mejorar las reservas, el Distrito propuso un plan de racionamiento. En estos tiempos de cambio climático, además, es necesario tener consciencia y responsabilidad sobre lo que podemos hacer individualmente.
¡No debes alarmarte! Sólo tienes que organizar muy bien tu semana y tomar algunas medidas para que te adaptes a la situación y puedas aportar a su solución. Así como distribuyes y ahorras tu presupuesto para compras, juegos de azar en Megapuesta casino y otras casas, viajes a la costa, etc., puedes hacerlo con el agua junto con otros ciudadanos. ¡Quédate en nuestro artículo para saber las razones del racionamiento de agua en Bogotá y tener pistas de cómo afrontarlo!
Contexto de la situación hídrica en Bogotá
A causa del Fenómeno del Niño, el crecimiento poblacional y de infraestructura, los embalses que proveen el agua potable en Bogotá han disminuido sus niveles. En redes sociales y en prensa se encuentran varias fotografías del antes y después del embalse La Regadera, Chuza y San Rafael para mostrar el impactante cambio.
Por esta situación, a partir del 11 de abril, se programaron los primeros cortes de agua en Bogotá y varias ciudades de Cundinamarca. Estos se harán por zonas, conformadas por barrios y municipios.
Causas principales del racionamiento de agua
La disminución de los niveles de agua en los embalses que alimentan Bogotá obedece a varios factores. A continuación, te explicaremos cuáles son para que entiendas por qué es necesario un plan de racionamiento en la ciudad, pero también tomar otras medidas a largo plazo.
Variabilidad y cambio climáticos
Entre las variaciones climáticas que influyen para la disminución del agua está el Fenómeno del Niño. Este se da cada 5 o 7 años y causa sequías, sobre todo, durante enero y febrero. En el 2024 vimos incendios forestales en Colombia, que son también consecuencia del mismo evento. Según los científicos, se produce por el aumento de la temperatura del Océano Pacífico, que se ha intensificado por el calentamiento global.
Los expertos investigan la relación entre el Fenómeno del Niño y el cambio climático, pues hay indicios de que este último puede afectar la duración y la frecuencia del primero. Esto hace que las sequías, las inundaciones y las olas de calor aumenten.
Sobredemanda y pérdida de agua
Otra de las causas de un mayor consumo ha sido el crecimiento de la ciudad y la urbanización de varias ciudades de la Sabana, pues hay más personas y, con ello, se gasta más agua.
Además, parte de la infraestructura es obsoleta a la hora de enfrentar los retos del cambio climático. Los expertos señalan que es necesario adecuarla para capturar el agua de lluvia, mitigar la expansión descontrolada con zonas compactas y crear edificios con sistemas inteligentes de gestión hídrica que eviten fugas y usen inodoros, grifos y duchas ahorradores.
Contaminación de fuentes de agua
Sin duda, la contaminación de los ríos y las fuentes hídricas hace que el agua consumible sea menor en Bogotá. No sólo afecta los ecosistemas, sino que además puede causar problemas de salud. Por ello, es necesario mejorar el sistema de tratamientos de las aguas residuales y vigilar los contaminantes industriales de la ciudad.
También, por tu parte, debes aprender que existen productos que usas en tu casa y pueden ser contaminantes, una vez se van al sistema de aguas residuales. Así que te recomendamos buscar información sobre cómo reducir tu impacto.
Implicaciones del racionamiento
El racionamiento puede afectar la vida diaria de las personas, pues con el agua se hacen muchas actividades de limpieza, cocina y cuidado. Para los comercios, el impacto puede ser aún mayor, pues necesitan más agua para atender a los clientes, hacer preparaciones y mantener los baños.
En el caso de los colegios, se puede afectar la calidad de vida de los estudiantes durante el día de cortes, ya que hay una gran cantidad de personas que usan baños y las zonas comunes requieren varias medidas de higiene para prestar un servicio digno.
Medidas adoptadas por las autoridades
Aunque las autoridades están desarrollando estrategias de concientización, además del plan de racionamiento, lo cierto es que el nivel de los embalses sigue bajando y aún no llueve. Los cortes buscan ahorrar dos metros cúbicos por segundo y parece que, hasta el 11 de abril, se disminuyó el consumo. Sin embargo, el Sistema Chingaza, que sustenta el servicio de acueducto en Bogotá, no puede recuperarse sólo con el racionamiento.
Qué pueden hacer los ciudadanos
Además de los racionamientos, las personas pueden implementar prácticas más sostenibles en su vida cotidiana. Si quieres ayudar a ahorrar el agua y a darle un uso consciente, puedes adoptar las siguientes medidas en tu casa. El plus es que también mejorará tu economía si tu factura disminuye el costo:
- Elige los electrodomésticos con buenos índices de uso de agua: en la información de ellos puedes verificar que tengan niveles adecuados de eficiencia en el ahorro.
- Usa sabiamente tus fuentes de agua: puedes reusar el agua en la lavadora e instalar dispositivos de ahorro en grifos del lavamanos y las duchas. Un gran truco es dejar un balde en la ducha para recoger el agua mientras te bañas y luego usarla en inodoros.
- Reduce el tiempo de uso de agua: puedes bañarte en menos tiempo y cerrar la llave del lavamanos mientras te cepillas los dientes o te afeitas. Si estás en la cocina, no dejes correr el agua mientras lavas los platos.
- Recoge agua de lluvia: esta te puede servir para algunas tareas de limpieza, para los inodoros y para regar las plantas. Recuerda que no todas las tareas requieren agua potable, así que no vale la pena desperdiciarla.
Revisa tu casa: si tu hogar tiene varios años de construido, te recomendamos consultar con un experto para que te asegures de que no haya fugas. Revisa las tuberías, las llaves y el sistema del inodoro periódicamente.
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